Hace unos meses escribí varios post sobre cómo el ser humano, en diferentes situaciones, puede actuar de una forma totalmente contraria a lo que cree, con anterioridad, que actuaría. Hoy voy a hablaros sobre los “psicópatas”, esas personas tan frecuentes en el género literario y cinematográfico, pero que en la vida real conviven con nosotros. No son esos psicópatas tan de película, si cumplen bastantes características de ellos, pero existe una diferencia, están socializados.

La diferencia principal entre un psicópata y un no psicópata es su forma de reaccionar ante un mismo acontecimiento. Por ejemplo, un no psicópata cuando se encuentra ante una situación de peligro, que le genera una ansiedad elevada, puede huir de la situación, enfrentarse a ella o quedarse en shock. Un psicópata ante la misma situación puede no experimentar peligro, es decir, no siente una elevada ansiedad. Por lo tanto, ¿qué tiene que experimentar un psicópata para tener una ansiedad elevada? Pues, simplemente, una situación mucho más extrema. Esa predisposición a una ansiedad baja ante estímulos fuertes e impactantes hace que sean candidatos idóneos para determinadas profesiones, siempre y cuando estén socializados.

Supongo que todos recordaréis el famoso y tristemente, caso del “asesino de la Catana”. Un chaval, que con tan sólo 16 años, asesinó a su padre, su madre y su hermana mientras dormían con una espada, específicamente, una catana. Tras cumplir su condena, salió en libertad y rehízo su vida. Lo curioso de su vida actual, es la profesión que ha escogido: trabaja como broker. Una profesión que requiere una alta tolerancia a la ansiedad y, por tanto, no todo el mundo puede dedicarse a ello. Se realizan operaciones de alto riesgo, con dinero ajeno. Una persona no psicópata ante la gran incertidumbre de que pueda salir bien o no la operación, no soportaría los niveles de ansiedad a los que llegaría su organismo. En cambio, un psicópata en esa misma situación puede tomar las decisiones correctas pues no tiene esa ansiedad que le limita para dar el siguiente paso. El caso de este asesino rehabilitado podría considerarse un claro ejemplo de psicópata socializado.

 

Puedes contactar con nosotros en www-conectia-psicologia.es o llamando al 674 241513. Estamos en Calle Puerto Rico, 8A, zona Hispanoamérica / zona Costa Rica, 28016 Madrid. Te ayudaremos con temas relacionados con este artículo o con otros problemas que quieras resolver.