¿Qué es la ansiedad generalizada?

El concepto de ansiedad está muy manoseado en la actualidad. Se usan indistintamente los conceptos estrés, angustia, ansiedad…. En el fondo, se trata de una emoción primaria y evolutiva de todo ser humano: el miedo.

El miedo es una emoción muy intensa, que se manifiesta con tensión muscular, taquicardia, respiración rápida e intensa. Esto nos resulta muy útil cuando hay un peligro real delante que nos acecha pues nos predispone a huir de ello o enfrentarlo con energía. Sin embargo esta emoción, que tan útil e importante ha sido durante nuestra evolución, perdería su sentido adaptativo si se convierte en une estado crónico.

Las personas, a diferencia de los animales, podemos pensar en el futuro. Esto nos resulta muy útil cuando se trata de planificar acciones y objetivos complejos. Sin embargo, se convierte también en nuestra principal fuente de sufrimiento, cuando anticipamos en nuestra mente posibles peligros futuros. Como hemos visto antes, ese posible peligro, aún en nuestra imaginación, nos provoca la emoción del miedo. Realmente nos puede beneficiar y ayudar cuando ese grave problema que estamos imaginando es bastante probable que suceda, dado que nos servirá para prepararnos ante ese riesgo o para solucionar las cosas para no suceda.

Como es bien sabido, la mayor parte de los problemas y peligros futuros que imaginamos, jamás llegan a suceder. Estar continuamente preocupados, con las sensaciones físicas del miedo, no es útil ni nos beneficia. Es como llevar continuamente con nosotros un paraguas abierto, por si acaso llueve. Esto es lo que los psicólogos denominamos ansiedad generalizada, personas sobre-preocupadas en las que sus miedos dejan de resultar adaptativos para convertirse en obsesiones y causa de un continuo malestar.

¿Cómo tratamos la ansiedad generalizada en Conectia Psicología?

En Conectia Psicología, tratamos a estas personas desde la empatía y la comprensión de su malestar.

  • Mediante técnicas de Mindfulness enseñamos a nuestros pacientes a vivir más en el presente y menos en el futuro.
  • También trabajamos con el paciente sus miedos, ayudándoles a analizar la probabilidad realista de que sucedan e incluso poniéndose en lo peor que pueda suceder, a pensar cómo podrían abordarlo.
  • Nuestros pacientes aprenden técnicas de gestión de su ansiedad: respiración pausada, meditación, lugar seguro, etc., que les ayudan con sus síntomas.