El título del artículo de hoy ha sido inspirado en mi hija de dos años y sus dos horas de canto antes de dormir. ¿Es normal? ¿Es bueno?
Cantar nunca ha sido nada malo. Por el contrario, se dice que en los niños estimula el cerebro de una manera sorprendente. Aquí resumimos algunos puntos del por qué:
- Ayuda al desarrollo del habla y la audición
- Es un medio para expresarse
- Desarrolla la imaginación
- Estimula la memoria y la concentración
- Mejora su conducta social
- Reduce la agresividad
- Les produce bienestar y felicidad
- Les tranquiliza y relaja
- Permite liberar tensión
- Mejora su estado de ánimo
- Les hace más sensibles
- Aumenta su autoestima
Si nosotros los adultos nos damos cuenta, si cantamos también gozamos de muchos de estos beneficios. No hace falta cantar bien.
¿Cuándo hay que preocuparse si el niño no deja de cantar?
En principio no hay por qué alarmarse, ya que los niños pequeños, con su naturaleza inquieta y curiosa, consiguen centrarse más en sí mismos y en el momento en que están viviendo cuando cantan.
Para preocuparse porque nuestros hijos estén todo el día cantando y hablando necesitan combinarse más elementos: edad del niño, su carácter, ambiente familiar, momento en el que se encuentre, que sea inquieto, que no se centre, que esté agitado, que no pare de tocar cosas… pero son cosas que por nuestra propia cuenta es muy difícil valorar, ya que aún combinando algunos de estos factores puede quedar dentro lo normal o bien tratarse de algún problema, por lo que se recomienda asesorarse bien con especialistas.
No dudes en contactarnos en conectia-psicologia.es para este tema u otros.
Mientras, disfrutemos de los conciertos de nuestros pequeños artistas, antes de que los echemos de menos.